La inflación británica de los precios al consumo volvió a subir en junio hasta alcanzar una tasa anual del 9,4%, la más alta desde principios de 1982, según las cifras oficiales que subrayan las posibilidades de una subida de los tipos de interés del Banco de Inglaterra mayor de lo habitual el mes que viene.
Una encuesta de Reuters entre economistas apuntaba a una lectura del 9,3%, frente al 9,1% de mayo.
El último aumento significa que el Reino Unido tuvo la mayor tasa de inflación en junio entre las economías avanzadas del Grupo de los Siete. Aunque Canadá y Japón aún no han presentado los datos de junio, es probable que ninguno de ellos se acerque al crecimiento de los precios en el Reino Unido.
El Banco de Inglaterra ha subido los costes de los préstamos cinco veces desde diciembre, en un intento de evitar que el aumento de la inflación se arraigue en la economía británica, y se espera que los aumente de nuevo en su reunión de política monetaria de agosto.
La Oficina Nacional de Estadística estimó un aumento interanual del 42% en los precios de la gasolina y un incremento de casi el 10% en los precios de los alimentos como los principales motores de la inflación el mes pasado.
«Con los nuevos aumentos de la factura energética que entrarán en vigor a partir de octubre, el pico de la inflación aún está lejos, y no se espera que vuelva al objetivo del 2% antes de mediados de 2024», dijo Yael Selfin, economista jefe de KPMG UK.
La Oficina de Estadísticas Nacionales indicó que la inflación subyacente se situó en junio en el 5,8%, frente al 5,9% de mayo, en línea con la previsión promedio de la encuesta de Reuters.
Hay indicios de que habrá más presión inflacionista.
Los precios pagados por las fábricas británicas por los materiales y la energía -un determinante clave de los precios que luego pagan los consumidores en las tiendas- fueron un 24,0% más altos en junio que un año antes, el mayor aumento desde que se iniciaron estos registros en 1985, dijo la ONS.
Los precios cobrados por las fábricas aumentaron un 16,5%, la mayor subida desde septiembre de 1977.
El ministro de Economía, Nadhim Zahawi, afirmó que el Reino Unido no es el único país que se enfrenta a una inflación galopante y que el Gobierno está aunando esfuerzos con el Banco de Inglaterra para atajar el problema.