Público abarrota salas en el estreno en Chile de «Mi país imaginario», en el día de cumpleaños 81 de Patricio Guzmán

El reconocido cineasta chileno Patricio Guzmán estrenó este jueves, el día de su cumpleaños 81, en las salas locales su más reciente film, «Mi país imaginario», un documental aclamado por la crítica internacional que reflexiona a través de voces femeninas sobre la transformación que se está produciendo de Chile, y que cuenta con imágenes únicas e impactantes del «estallido social» de 2019 filmadas por periodistas de Efe.

A la premier, que se realizó en el cine Insomnia -también conocido como Teatro Condell- acudió la productora del filme, Alexandra Galvis, diversos actores y actrices, autoridades y decenas de expectantes ciudadanos que abarrotaron la sala. La función terminó con el cumpleaños feliz cantado por el público.

Al mismo tiempo, el documental -que ha generado el aplauso internacional y que se esperaba con ansiedad en el país andino- se estrenó en salas de la capital, Santiago de Chile, con una gran afluencia de público pese a que la hora y el día, jueves, no invitaban a los chilenos a salir.

El fundador del INSOMNIA Teatro Condell, Claudio Pereira, y Alexandra Galvis (i), productora del documental.

Galvis reveló a El Mostrador que en Santiago el estreno del documental se estrenó con mucho público en la sala Ceina, el Cinehoyts de La Reina, Normandie y Matucana 100.

En tanto, la premiere regional en INSOMNIA Teatro Condell, la función de las 19:00 horas contó con participación del colectivo Las Tesis -que además son parte del film- y algunos ex constituyentes. Además hubo que sumar otra función a las 22:00 horas «porque se quedó mucha gente afuera».

En la ocasión, Galvis charló con el fundador del teatro, Claudio Pereira, «en una conversación muy emotiva, primero, porque hacía falta verla en salas, y porque hacía falta volver a las salas, pero también por lo que es la película».

«Es una película que ayuda mucho a digerir lo que nos pasó y lo que nos está pasando. Tres años suenan poco, pero ha pasado mucho en tres años, y creo que falta mucha reflexión y falta digerir esas emociones. Creo que la película es una grandísima reflexión de Patricio, muy serena, con los tiempos que maneja él, con las reflexiones que son tan propias suyas, y me parece que eso hace que haya una catarsis verdadera en la sala. La gente extrañamente ríe, llora y aplaude en la mitad de la película y eso la verdad no nos pasaba hace mucho», destacó.

«Es una doble alegría: el regreso del cine chileno a las salas, viendo por fin salas agotadas, que hacía mucha falta, pero por otro lado no es agotada con cualquier película, sino con una película que necesitamos ahora, y la necesitamos porque es el momento de digerir las emociones que hemos ido cargando en los hombros hace tres años. Incluso creo que no nos damos cuenta que esto es muy necesario», remató.

Pereira señaló que el documental «produjo una alta sensibilidad e impacto en el público, porque es una película que reflexiona, tiene una perspectiva histórica, y sobre todo con la mirada profunda de Patricio Guzmán, que en toda su filmografía siempre ha problematizado el presente y pasado de Chile».

«Esta película en particular además plantea temas hacia el futuro. Es una película muy particular porque dialoga en forma directa con el actual presente, actual presente que además está construyendo y pensando un mejor futuro para Chile, en relación a la Convención Constituyente y por supuesto en relación a replantear una nueva Constitución, con la perspectiva de lo que significó el estallido social en Chile».

Trayectoria

Cronista de la realidad chilena en documentales como «La batalla de Chile» (1975), «Nostalgia de la luz» (2010) o el «El botón de Nácar» (2015), Guzmán alcanzó renombre internacional en 2019 al ganar el premio al mejor documental con «La Cordillera de los Sueños», una obra “prospectiva” que “ilumina la extraña historia” de su país y con la que fue nominado a los premios Goya.

«Mi país imaginario», estrenado en las Sesiones Especiales de la 75 edición del Festival de Cannes, comienza con imágenes tomadas por periodistas de la Agencia Efe sobre el «estallido social» que sacudió Chile en octubre de 2019 y ahonda en esa protesta que ha derivado en el proceso de redacción de una nueva Constitución.

La subida de 30 pesos en el precio del boleto del metro fue la chispa que «incendió el país» y que originó «una revolución espontánea, sin organización, por internet», a la que el cineasta siempre vio posibilidades de triunfo.

«Quienes se oponen al crecimiento de la historia son los mismos de siempre. La derecha no tiene ningún futuro. Lo que propone en Chile es absurdo, es el pasado, y el pasado ya se ha probado que no sirve, entonces no tiene mucho porvenir político. Tiene fuerza pero no porvenir», dijo en Cannes a Efe.

Guzmán (Santiago de Chile, 1941) narra su relato a través de algunas de sus protagonistas femeninas porque en su opinión «son las que tienen más claro lo que hay que hacer. La mujer chilena es muy avanzada en general, históricamente siempre ha sido así. En la mitad del rodaje me di cuenta de que eran más claras y pensé que eran ellas las que iban a contar la película».

Reside en la actualidad en París, donde piensa proseguir y desde donde el próximo 4 de septiembre verá el resultado del referéndum obligatorio en el que los chilenos decidirán si aprueban la Constitución que durante el último año ha redactado una convención paritaria y democráticamente elegida, fruto de la protesta.

O si se rechaza y sigue en vigor la escrita en 1980 por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1989), que solo ha sido parcialmente reformada en democracia.

Su próximo proyecto tendrá de nuevo como protagonista a su país, ya que Guzmán confiesa que «solo sé hacer películas de Chile. Tengo una grave limitación».